Climas

Los climas dependen de muchos factores. Como hemos visto, el movimiento de rotación y el de translación combinados hacen que existan las estaciones y que distintos lugares reciban una intensidad variable de sol a lo largo del año (mayor en el Ecuador y menor en los Polos).

Es por esto que la temperatura disminuye en la medida en que nos acercamos a la Antártida o al Ártico, generándose un gradiente que nos permite establecer una primera clasificación de las regiones climáticas:

 

 

  • Zonas tropicales: comprendidas entre los Trópicos de Cáncer y Capricornio (paralelos de 23° 27' Norte y Sur). Allí las temperaturas son las más elevadas a lo largo de todo el año.
  • Zonas templadas: situadas a los lados de la zona tropical, tanto en el hemisferio norte como en el sur. Están comprendidas entre los paralelos 23° 27' y los círculos polares a 66° 33'. Las variaciones estacionales son mayores puesto que las temperaturas son altas en verano y bajas en invierno.
  • Zonas polares: ubicadas a partir de los círculos polares ártico y antártico (66° 33' Norte y Sur). Allí el frío es intenso durante todo el año e incluso llegando a los polos ¡la noche puede durar 6 meses!

En este sentido, puedes observar que la temperatura varía con la latitud. Lo mismo ocurre con la altitud puesto que hace más frío en la medida en que nos elevamos por sobre el nivel del mar. Es por esto que podemos encontrar nieves eternas en zonas templadas: ¡¡porque se encuentran en lo alto de las montañas!!

Esto no ocurre en toda la distancia que nos separa del espacio exterior ya que la atmósfera se encuentra dividida en capas en las cuales la temperatura aumenta o disminuye (el Gradiente Vertical de Temperatura cambia). Pero en la troposfera, la capa que se encuentra en contacto con la superficie terrestre, podemos afirmar que, salvo variaciones locales normales, cada 1000 metros la temperatura se reduce aproximadamente 6,5º C.

También debemos saber que la existencia de la atmósfera en sí es fundamental para la existencia de los climas... gracias a ella tenemos el famoso efecto invernadero que hace posible la vida. 

La cercanía al mar (y la presencia de agua en general) también modifica el clima debido a que los continentes y océanos absorben y emiten en forma diferente la radiación del sol. El agua tiende a regular la temperatura por lo cual la diferencia entre las horas de frío y calor en ecosistemas costeros, marinos y humedales es menor que en regiones continentales.

De la misma forma la vegetación espesa tiende a atenuar el frío y el calor mucho mejor que el suelo desnudo. Este es uno de los motivos por los cuales la deforestación trae graves consecuencia para el clima local (¡ya sabes que afecta seriamente el clima global por el cambio climático!)

Las ciudades en sí también son un mundo aparte... allí los vientos no corren tan fácilmente, el asfalto funciona muy distinto que el suelo, la vegetación está limitada a las veredas y algunas plazas. Todos estos cambios alteran las características particulares del lugar formando microclimas específicos.

Nos interesa también conocer la cantidad y frecuencia de las precipitaciones, sus variaciones estacionales, etc. ¿A que nos referimos con precipitaciones? A lluvia, nieve, granizo... Y estas dependerán de la cercanía a reservorios de agua, la cobertura del suelo, los vientos, las formas del relieve, etc.

Para los ambientalistas resulta muy importante comprender las precipitaciones, no sólo porque de ellas dependen muchos organismos vivos, sino también por su interacción con los contaminantes atmosféricos.

¿Y sabes que más debemos conocer? ¡Los vientos! Se originan por las diferencias de temperatura entre diversos sitios del planeta. De esta forma las masas de aire suavizan el clima y distribuyen el calor. En términos generales el aire caliente se desplaza hacia los polos y el aire frío hacia el Ecuador.

Así pues, los vientos también nos dirán en muchos casos hacia dónde irán las sustancias tóxicas que liberamos al ambiente. ¿Sabes por ejemplo que en la circulación general de la atmósfera está la explicación al adelgazamiento de la capa de ozono? Pues si, las masas de aire caliente viajan a los polos... ¡llevando consigo los CFCs (Clorofluorocarbonos)!

Luego cada sitio posee otros elementos que inciden sobre la intensidad, frecuencia y dirección de los vientos. Asimismo, los vientos húmedos determinarán las precipitaciones y las variaciones térmicas, la presencia de accidentes en el relieve (montañas, mesetas, etc.) alterará la circulación natural del aire, etc. El clima es verdaderamente complejo pero muy, muy, muy importante para conocer el ambiente. 

Conozcamos ahora los biomas...